viernes, 12 de septiembre de 2014

SENDEROS DE SILENCIOS





Quizás en este silencio encuentre el sonido exacto
que libere de la memoria los abortos de amores,
los engendros que no tuvieron la valentía de nacer,
aquellos se perdieron en las inconsistencias de mi vida,
los que marcaron un minuto de mi historia
o aquellos que fabricaron siglos de angustia

Tal vez pueda encontrar los instantes en que mi alma fue libre
en este tormentoso caminar de pesadillas, penumbras y lluvias
pues de ellos rescataré las esperanzas de un pasado,
que vuelve para recordarme que el futuro fue primero

Mi vida ha caminado en jardines de espinas
en caminos pedregosos,  senderos deshabitados,
y en carreteras de vertiginosa realidad
también ha tenido primaveras esplendorosas
aquellas que justifican cada dolor y toda condena,
de una de ella conservo un sol que entibia mi alma,
de otra  enseñanzas que marcan mi forma de viajar.

En una de esas primaveras veo las calles de mi infancia,
aquellas que fueron el inicio para el viaje de mis sentires,
las veo nítidas, detenidas en el tiempo en una espera estéril

Se revuelcan en la memoria los hechos de mi adolescencia,
en que quería vaciar el mundo para construirlo de otra manera,
cuando casi siempre tropezaba con los sueños o luchaba por ellos,
los hechos cuando mi ser se adentraba en los caminos del amor
con astucia y temores, con verdades y dolores
y desde allí aprendí a forjar corazas y anestesiar mis sentidos

Ya siendo hombre construí débilmente la vida que creí correcta
formé instituciones de las que alguna vez renegué,
a partir de ella rescato la primavera del sol que hoy conservo,
los tiempos de aquellos hechos se acercan a los dolores
que se manifiestan en los silencios de este espacio

Los senderos me llevaron por variados paisajes
por historia de sueños, por ambiciones efímeras
por precipicios de angustias que se llevó lo construido,
en medio de ello, una breve primavera que me devuelve la fe

Hasta aquí me han traído las huellas de mi historia
y estos silencios ayudan a mirarla con cariño y quizás nostalgia
pero también con la esperanza de volver a construir
el castillo de arena en el desierto de mi alma
aquel donde el viento solo deje huellas de su paso

y sirva de refugio… mientras llega otra primavera 

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